Guardia Civil, Policía Nacional y Agencia Tributaria han detenido a los 38 integrantes de una organización criminal de origen búlgaro dedicada a la venta de tabaco ilegal y han desmantelado las tres fábricas que tenía la banda en Madrid, Murcia y Alicante, donde producían 18.000 cigarrillos al minuto.
La organización abastecía tanto al mercado nacional como al internacional, con hasta 14 marcas distintas de tabaco falsificado, y contaba con varias naves para almacenar la materia prima, así como remolques tonelaje cargados con el producto final en estacionamientos de camiones. Con esta operación, denominada TERVER-CENTINELA, ya son 23 las fábricas ilegales de cigarrillos desactivadas hasta la fecha en nuestro país, según informan en una nota de prensa.
En esta ocasión los agentes se han incautado de 43.160 kilos de picadura de tabaco y 1.443.000 cajetillas, con una valoración estimada de más de nueve millones de euros, y de seis vehículos, una cabeza tractora, dos camiones-remolque y diversa maquinaria dispuesta para realizar el proceso completo de fabricación y empaquetado.
A finales de septiembre se realizaron los registros en los distintos centros de fabricación y almacenaje, cuando la organización se encontraba a punto de iniciar la producción en la tercera de sus fábricas, situada en Albatera (Alicante).
En esta nave se detuvo a once personas, cinco de ellas de nacionalidad búlgara, cinco ucraniana y una rusa y se intervino la maquinaria y el cartonaje necesario para envasar cigarrillos de distintas marcas, abundante material de empaquetado, así como 12.960 kilos de hoja de tabaco y picadura, además de varios vehículos.
Otras de las fábricas se encontraba en la localidad de Blanca, donde fueron arrestadas catorce personas (ocho ciudadanos búlgaros y seis ucranianos) y en la que se intervinieron 41.840 cajetillas de cigarrillos de distintas marcas, 1.800 kilos de hoja de tabaco picada y material de fabricación.
La restante actuación y más significativa en cuanto a capacidad de producción se llevó a cabo en el municipio de Villanueva de Perales (Madrid), donde se procedió a la detención de otras doce personas, también de nacionalidades búlgara y ucraniana.
En el lugar se llegaron a intervenir un total de 462.533 cajetillas de cigarrillos ya elaborados, 4.900 kilos de hoja de tabaco picada y el correspondiente material de fabricación.
