La Guardia Civil de Galicia ha destapado un fraude consistente en la
utilización de gasóleo B, de uso agrícola, en camiones de transporte. Ese tipo de combustible está subvencionado y solo se puede destinar a maquinaria agrícola e industrial, y las gasolineras solo pueden vendérselo a personas que cuenten con autorización y para los vehículos cuyo uso es permitido el gasóleo B, maquinaria industrial y agrícola. El fraude consiste en que un comprador usa una autorización para comprar gasóleo B y después lo usa de manera irregular en camiones y otros vehículos que solo pueden utilizar el tipo A (el mismo tipo de los turismos). Así los transportistas se benefician del ahorro considerable que supone con respecto al gasóleo A. Por lo tanto,
además del fraude a la Hacienda pública, están realizando una competencia desleal con las otras empresas que sí utilizan el gasóleo más caro.
En apenas una semana se han detectado a seis infractores de ese tipo en distintas carreteras gallegas. La Guardia Civil percibe un aumento de este tipo de infracciones en zonas en las que hay mucho tráfico de camiones y de otros vehículos de obras y servicios.
En la mayoría de los casos
la investigación parte de alguna denuncia por parte de otros transportistas que se ven perjudicados económicamente por esas prácticas irregulares, debido a la competencia desleal que esto supone. Precisamente, la Guardia Civil destaca esta colaboración como la mejor forma de luchar contra el fraude del gasóleo. Los agentes de Tráfico los que inspeccionan los camiones y efectúan la denuncia y esta es remitida al servicio de aduanas e impuestos de la Agencia Tributaria, que es la que se encarga de tramitar las multas.
Las sanciones por detectar combustible bonificado en vehículos que no pueden usarlo son muy elevadas, de 3.600 a 12.000 euros. Además, la multa se duplica en caso de reincidencia y se ordena el precinto e inmovilización del vehículo.